OEA Condena la Irrespetuosa Irresolución de Ecuador en la Embajada de México

La Organización de los Estados Americanos (OEA) se ha erigido como testigo y juez en una situación diplomática candente, condenando enérgicamente la irrupción de fuerzas ecuatorianas en la embajada de México en Quito.

La resolución, aprobada por el Consejo Permanente de la OEA, no solo reprende la incursión del pasado 5 de abril, sino que también denuncia los actos de violencia perpetrados contra el personal diplomático mexicano en territorio ecuatoriano.

Durante una sesión extraordinaria en Washington, las delegaciones de la OEA discutieron y votaron sobre la resolución. Ecuador, en un gesto esperado, votó en contra, mientras que México estuvo notablemente ausente en la votación. Con 29 votos a favor y solo El Salvador optando por la abstención, la OEA fue contundente en su posición.

El embajador de Colombia ante la OEA, Luis Ernesto Vargas, expresó el firme compromiso de su país con la inviolabilidad de las sedes diplomáticas y condenó rotundamente cualquier violación de este principio fundamental en cualquier lugar del mundo. La resolución, presentada por la misión de Colombia tras consultas con otros estados miembros, también insta a ambas naciones, Ecuador y México, a iniciar un diálogo constructivo para resolver la crisis de manera pacífica.

Esta no es la primera vez que la OEA aborda este asunto. En sesiones consecutivas, el viceministro de Movilidad Humana ecuatoriano, Alejandro Dávalos, ha defendido la irrupción en la embajada de México como un acto necesario en el marco del cumplimiento de sentencias judiciales contra el exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas. Sin embargo, las justificaciones de Ecuador fueron duramente cuestionadas en la OEA, con varios embajadores resaltando el peligro que representa el desconocimiento del principio de inviolabilidad para la convivencia amistosa entre los estados.

La embajadora de México ante la OEA, Luz Elena Baños, estuvo ausente en ambas sesiones, dejando una silla vacía que simboliza la tensión entre las dos naciones. Mientras tanto, embajadores de diversos países, como Bolivia, Chile, Costa Rica y Panamá, reiteraron su condena a los actos sin precedentes ocurridos en Ecuador, subrayando la gravedad del incidente para toda la región.

La reacción de Ecuador tras la aprobación de la resolución fue moderada. El viceministro Dávalos reafirmó la posición de su gobierno y manifestó la voluntad de entablar un diálogo constructivo con México, aunque subrayó la necesidad de que dicho diálogo sea mutuo. Asimismo, recalcó la importancia de que las misiones diplomáticas eviten la injerencia en los asuntos locales del país anfitrión, reiterando la disposición de Ecuador para resolver la situación de manera pacífica.

En última instancia, la resolución aprobada por la OEA será transmitida al secretario general de las Naciones Unidas, subrayando la relevancia y el alcance global de este conflicto diplomático entre Ecuador y México.

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